8 MANERAS DE SABERLO...
La silla representa el objeto donde el trabajador se encuentra la mayor parte del tiempo durante su jornada laboral; es por eso que no saber escoger la silla de oficina ergonómica adecuada puede causar problemas de salud e incluso afectar la productividad del empleado. En DUNATI queremos ayudarte a saber en qué debes fijarte realmente para poder escoger la silla ergonómica correcta, asegurándote así lo que tú y tu oficina de verdad necesitan.
Lo primero que se debe considerar en tu silla ergonómica es el apoyo lumbar que ésta tenga, entendiéndose que no es solo un mecanismo que soporta la espalda; debe, además, estar diseñada para asemejarse lo más posible a la curva natural de la columna. Existen sillas ergonómicas con cojines o almohadillas por detrás de la malla de respaldo que proporcionan un soporte en la espalda y, en algunos modelos, estas pueden regularse en altura o la tensión que generan, dándole al usuario una completa capacidad de personalizar su silla, hasta que esta se ajuste a él.
La reclinación de tu silla ergonómica es indispensable para asegurar un movimiento continuo de la columna, evitando las posiciones rígidas. Siempre es mejor elegir una silla sincrónica a una reclinable, puesto que esta última mueve tanto el asiento como el espaldar de forma conjunta. Mientras que una sincrónica mueve el asiento solo cuando el espaldar ha alcanzado cierto grado de inclinación, logrando que el trabajador pueda estrecharse o inclinar la espalda sin sentir que las piernas se levantan al mismo tiempo.